La vida es una luz que viaja a travéz de la noche de los sueños,
caminos largos recorridos a pasos lentos,
entre las sombras difusas de esperanzas e ilusiones fallidas
vamos solos iluminando el sendero, sin rumbo fijo
pues todo es oscuridad,
la luz titilante primero e intensa y firme despues del otro
nos indica que llegamos no al final,
sino al comienzo de un viaje de a dos,
es ahí cuando nuestra luz perdura, es entonces cuando somos
dos luciérnagas que viajan hacia el horizonte en busca del sol,
para proseguir la vida...